Renovarse o morir
Es el dilema al que se enfrentarán muchas salas en las semanas y meses por venir.
Si no cuentan con el capital para poder proyectar cintas en 3D, ¿cómo mantenerse a flote?
¿cambiando de paradigma, exhibiendo sólo cintas que no utilizan ese reclamo, o mejor aún, dándonos la oportunidad de re visitar clásicos que una vez que terminan su corrida comercial, sólo se pueden conseguir en un videoclub o a través de internet.
La que sea su decisión, la exhibición está cambiando, y Disney es uno de los que más están impulsando desde hace ya algunos años eses cambio, con los re estreno en pseudo 3D de:
the nightmare before christmas y Toystory, así como la futura versión de Alice de Tim Burton.
Y La cinta de James Cameron, aún no sabemos si Avatar será buena, mala, intrascendente o no, pero ciertamente está demandando salas modernas, lo que se reflejará en una inflación en los precios, siendo que justamente ofrece una experiencia diferente para que la gente que prefiere su home theater salga de nuevo a los complejos, aunque es previsible, que comenzaremos a ver opciones de cine en casa que también ser´na capaces de mostrar contenidos en #d, tal vez, para cuando las salas nuevamente tengan que cambiar a los métodos que ya no requieren d elos lentes.
Como sea, el día 3 de Noviembre tuvo lugar la premiere londinense y las funciones de prensa de la cinta de Zemeckis y Carrey y vaya que si se nota que está hecha para el 3D desde el primer día, Zemeckis en su tercera iteración da en el clavo, la historia es conocida, aceptada, para el gran público y los cinco años de diferencia entre the polar express y ésta cinta han traido grandes avances.