Good morning, and in case I don't see ya, good afternoon, good evening, and good night!
Conocida en otras regiones como "Truman Show: Historia de una vida" es una cinta de aquel año de 1998.
1998 fue el año en que Francia por fin se corono campeona del mundo, los Broncos por fin rompieron la hegemonía de más de una decada de jetatura de la conferencia americana, los equipos mexicanos comenzaron a participar en la copa libertadores, El escandalo de Bill Clinton y negar en TV que hubiera sostenido relaciones con la famosa Monica Lewinsky, los olímpicos de Nagano (y no descanse hasta que fui a esa ciudad), se inauguro el puente Akashi-Kaikyo, Titanic, su canción y su euforia no parecían tener fin, la India ejecutaba pruebas nucleares, Microsoft ya tenía problemas por monopolio y apenas estaba lanzando el Windows 98 (SE una de mis versiones preferidas llegaría hasta 1999), la Expo 98 tiene lugar en portugal de Mayo a septiembre, la bomba en Oklahoma City, Michael Jordan gano su sexto título con los Chiccago Bulls, y para todos los amantes de Google, fue en septiembre de ese año que se inauguro en California y lamentablemente se autorizo el acta de extensión del copyright (Sony Bonno), los Yankees de Nueva York barren en la serie mundial e imponen marcas y lamentablemente Kurosawa se nos adelanto...¿ya se acordaron?
Fue en ese año que se estreno Truman Show, con un Jim Carrey que apenas unos años antes había filmado "The Mask", "Liar, Liar", un par de cintas de "Ace Ventura", había sido parte de "Batman Forever" y estaba muy presente en las pantallas, pero su fama se la debía a su capacidad de gesticular, así que el hecho de que la cinta que dirigió Peter Weir (que si que se toma su tiempo entre proyectos, su cinta después de ésta fue la de Rusell Crowe Master and Commander: The Far Side of the World) no fuera una comedia, si no que invitaba descaradamente al espectador a reflexionar sobre el star system en el que vivimos hizo que paradojicamente éste filme recibiera mucha atención y se formara expectación.
A la distancia ya podemos hablar de la historia del filme con menos precauciones, pues bien, en 1997, no existía Youtube, no era tan universal ni democrático el paso a la fama, la oportunidad más "pareja" era la del reality show (flagelo que había desaparecido, pero ésta de vuelta) y aún así, lo que se tenía era lo que Andy Warhol llamo "quince minutos de fama", pues es una condición efímera, mientras la cinta esté en las pantallas, el programa al aire, tu columna impresas, todo mundo te conoce, pero al instante siguiente se han olvidado de ti, es ahí donde entra el "genio creativo" de Christof (Ed Harris), el Padre de Truman, la mente que ideo transmitir cada segundo de la vida de un niño no deseado a una audiencia global (la cinta es corta, lo único que vemos de global es las reacciones en Japón), cada sorpresa, cada descubrimiento, cada anhelo, cada vergüenza, de esa inmensa charada en la que lo único real es Truman, todos los demás son actores y hay un guión para cada secuencia de su vida, incluso para la muerte de su padre que le deja con un pánico al mar, que vence cuando decide que es hora de irse y burla la seguridad que se había instalado en torno a él, una lucha que inicia cuando una luz del gigantesco foro que se hace pasar por SeaHaven, su hogar durante los últimos 30 años, cae y lo llena de dudas, que son reforzadas cuando su "padre" muerto aparece vivo . Lo que desencadena su intento de huida, al darse cuenta poco a poco, por errores técnicos de la elaborada farsa que se ha montado alrededor de él, no sólo es descorazonador saber que su vida es una mentira, también da pánico, pero aún así, Truman sale del set y su audiencia fiel cambia el canal.
En lo que se refiere a cintas de Hollywood, pocas veces hay una critica al interior de las mismas así de obvia.
Jim Carrey es un actor, antes de ser ese tío que gesticulaba, él siempre fue un actor, nos entrega un Truman Burbank de una manera directa y es aquí donde parece que el mundo es un pañuelo, mientras que otra cinta de Carrey, Eternal Sunshine of the spotless mind, el guionista de ésta es nada menos que Andrew Niccol, el escritor y director de Gattaca, otra gran cinta que no ha sido tratada como es debido,
En lo que se refiere a cintas de Hollywood, pocas veces hay una critica al interior de las mismas así de obvia.
Jim Carrey es un actor, antes de ser ese tío que gesticulaba, él siempre fue un actor, nos entrega un Truman Burbank de una manera directa y es aquí donde parece que el mundo es un pañuelo, mientras que otra cinta de Carrey, Eternal Sunshine of the spotless mind, el guionista de ésta es nada menos que Andrew Niccol, el escritor y director de Gattaca, otra gran cinta que no ha sido tratada como es debido,
